También obtuvieron un trofeo cada uno Cartagena y Leonardo Hernández
Paco Martínez - 13/10/2014 (burladero.com)
Hasta saltar al ruedo el quinto, la tarde había sido una más, entretenida pero sin mucho condimento, pero cuando salió al ruedo Plateado y lo recibió Ventura a portagayola con la garrocha campera, el asunto comenzó a funcionar. Después, todo lo vivido fue a más, sobre todo en los tercios de banderillas ejecutados con Sueño y Morante, agresivos y espectaculares, con mucha transmisión a los tendidos, estando el ambiente a revientacalderas, mascándose ya un premio gordo si en la suerte suprema el caballero estaba acertado. Así que Ventura sacó de nuevo a “Remate”, su caballo matador, para colocar las cortas y recetar un rejonazo en buen sitio pero que requirió el empuje del jinete cayendo el acero en un lugar letal y ahí llegó el delirio, pues el respetable no satisfacía sus deseos con los dos pañuelos blancos indicativos de sendas orejas y pedía más, llegando el dilema para el Sr. Presidente, nuevo en el palco este año, que sopesaba pros y contras, sacando al final el distintivo blanco indicativo de la concesión del rabo como consecuencia de la presión ejercida por un público al que todo le parecía poco. Así que Ventura dio la vuelta al ruedo en calor de multitudes despidiéndose de sus admiradores besando las arenas de la Misericordia, agradecido y contento de su labor, ya que en su primero no había podido sacar lo que él lleva dentro merced a las escasas condiciones de un toro aplomado, el peor de la corrida, y al deficiente manejo de los aceros en la suerte suprema.
Una oreja se ha llevado también Andy Cartagena de su primero, un astado que ha manseado en el primer tercio pero que ha colaborado con su rejoneador, el cual ha destacado en su toreo a dos pistas y en la ejecución de la suerte suprema, gracias a lo cual el público le ha demandado con fuerza un segundo trofeo que, en esta ocasión, el Sr Presidente no concedió. Con el cuarto de Bohorquez, como toda la corrida, que pegaba arreones de manso, su labor no termina de levantar el vuelo y la colocación de los rejones de muerte tampoco ayudan a empujar al respetable para que demande trofeo alguno.
Y Leonardo Hernández tampoco se ha ido de vacío merced a la oreja que le ha sido concedida en el sexto, destacando su trabajo sobre Venenoso con el cual se han acortado los espacios entre toro y caballo. La faena iba con el viento a favor pero un defectuoso rejón de muerte atravesado y caído han simplificado el premio en una oreja, a la postre el único que se ha llevado, pues en el tercero ha sido silenciado tras la complicación en la muerte suprema.
Al final tarde histórica, pues desde que se le otorgara un rabo a El Juli en nuestro coso en el año 2.000, tan significado trofeo no había sido concedido hasta hoy, dentro de una feria 2014 en la que casi todo ha ido de cara.
Ficha del festejo:
Andy Cartagena, oreja con fuerte petición y ovación
Diego Ventura, silencio tras aviso y dos orejas y rabo
Leonardo Hernández, silencio tras aviso y oreja
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